Primavera

En la primavera de 1962 yo tenía 16 años era una chica ni guapa ni fea, era callada discreta y trabajadora, y por esa manera de ser atraía a los jóvenes de mi barrio que entonces eso era lo que les gustaba (una mujer de su casa) y esas cualidades las reunía yo. También le guste a uno no tan joven, su nombre era Manuel pero le llamaban Miguel y tenía once años mas que yo, era diferente a los demás era mas culto, en su pueblo había hecho de maestro y en Barcelona tubo suerte y se coloco en las oficinas de una empresa de transportes. Iba mejor vestido que los demás tenía moto y era muy simpático, en fin el Príncipe Azul, con el que todas las chicas sueñan. Esa historia duro dos años que para mi fue cómo un cuento de Hadas. Fui a los mejores cines al teatro a todos los sitios que yo nunca había ido, pero siempre con mi madre. Ser el mayor de los hermanos supone tener mas responsabilidad, hay que ayudar al sostén de la casa cuando falta el padre, pero ser la mas pequeña también tiene sus inconvenientes yo no tenía amigas para salir, ni podía salir sola no estaba bien visto, así que cómo mi madre estaba sola me acompañaba. Así que ese mirlo blanco se canso y ese amor se acabo. Todo tiene un porque, no era el hombre que tenía que compartir su vida conmigo, pero fue la persona que hizo que esos dos años de mi vida fuera una chica feliz. Una época muy bonita de mi vida que de cuando en cuando recuerdo con mucho cariño.